Actitudes que favorecen la adversidad

El término adversidad viene del latín, adversitas, que es la cualidad de adverso, se refiere a algo o alguien que resulta contrario u opuesto, desfavorable o enemigo.

“No hay nadie menos afortunado que el hombre a quien la adversidad olvida, pues no tiene oportunidad de ponerse a prueba” Lucio Anneo Séneca.

Quizá puedas pensar que es una locura pretender recurrir a la adversidad para poder lograr fortaleza, no es tan sólo en esta situación donde puedes tener oportunidad de crecer, pero si se presenta la adversidad, utilízala en tu favor.

Todos los seres humanos estamos expuestos a los tropiezos y fracasos, son parte de nuestra vida, son parte prácticamente de nuestra formación.

Posiblemente te gustaría una vida sin adversidad, pero no dudo que eso te impediría crecer como ser humano y lograr los aprendizajes necesarios para enfrentar con entereza la vida, como bien lo menciona Seneca en su frase célebre anterior. Ya que la adversidad nos pone a prueba y nos muestra de qué material estamos hechos. 

Te recomiendo adoptar algunas actitud que favorecen la adversidad:

• Buscar una manera de limitar, de contener el impacto de la dificultad, sin importar cuan inmensa parezca.
• Centrarte en los hechos a partir de las siguientes preguntas: ¿Qué ocurrió realmente? ¿qué parte del problema fue ocasionado por mí y qué le pertenece a otro? ¿Qué puedo aprender de otros que han vivido experiencias similares? ¿Qué puedo hacer para mejorar la situación? ¿Cómo puedo sacarle ventaja a esta situación y limitar su influencia?
• Buscar información clave para tomar decisiones acertadas y convertir las situaciones difíciles en oportunidades.
• Buscar orientación de personas expertas en el tema.
• Dirigir apropiadamente las acciones.

Cuando un cuenco o un jarrón precioso cae y se rompe en pedazos, normalmente suspiramos y tiramos los pedazos rotos, pues ya no sirven. En Japón existe un arte tradicional llamado kintsugi, que se especializa en recrear cerámica rota. Se utiliza un metal precioso, como el oro líquido o la plata, para pegar las piezas rotas y convertirlas en algo de gran belleza y valor.

Date la oportunidad que la adversidad te transforme en una persona de mucho más valor y riqueza.